BOLSOS MINIS PARA EL VERANO

Adoro el verano, me parece la estación por excelencia. Llega el calorcito, tan ansiado por muchos. Comienzan las agradables noches de terraza, al son de una buena música y una mejor botella de vino. Dejamos de lado la lana y vamos disfrutando, suavemente, de la ligereza del lino y el algodón. Me siento mucho más liviana y no sólo por incrementar los gazpachos, las ensaladas y las frutas estivales en mi dieta.

Y es que aparco la agenda en casa, dejo las llaves del coche y aprovecho las buenas temperaturas para caminar más; el libro lo reservo para la playa, la alergia y los pañuelos se quedaron con la primavera, el moreno natural relega mi bolsita de pinturas al primer cajón de la cómoda. Cualquier día, o cualquier noche, sólo necesito dinero, llaves de casa, DNI y pocas veces, el móvil. Por ello, en esta época me encanta llevar bolsos minis en los que quepa lo justo.

Hicimos muchos del estilo que os mostramos en las fotografías el año pasado, cuando el Doctor Cáspulo nos consiguió una piel de pelo corto marrón cámel, muy original por eso de tener el pelito natural. Y como parece que las pieles son más para el invierno, por aquello de mantener el calor, pensamos en hacer los bolsos más reducidos y así poder utilizarlos durante todo el año.

Dicho y hecho. Unos con el asa en marrón oscuro y otros con marrón claro. No hay un modelo igual: adornos de cerámica o coco, hilo de diferentes colores, cierres con botón metálico o con cremallera interna. Miden aproximadamente unos 15 cm. de ancho x 18 cm. de alto y cuestan 9 euros. Yo ya he rescatado el mío del fondo de mi armario para comenzar la temporada.